Cuando estas de baja médica suelen decir el rumor de que la empresa puede ponerte un detective. Y aunque podemos pensar que es imposible, en España sí existe esa posibilidad. Las empresas pueden contratar detectives privados, pero con límites. En este artículo te contamos cuándo y cómo pueden hacerlo.
Si has tenido algún problema con tu empresa o tienes dudas, necesitarás la ayuda de un abogado experto. En Easyabogado encontrarás abogados laboralistas que pueden ayudarte y asesorarte con tu caso.
En España es legal que una empresa contrate a un detective privado para vigilar a un trabajador, pero solo en determinadas circunstancias y con ciertos límites.
La Ley de Seguridad Privada permite que los detectives actúen cuando exista una sospecha fundada de fraude o abuso, como en casos de bajas laborales dudosas, competencia desleal o uso indebido del tiempo de trabajo.
Pero tienen que cumplir ciertos aspectos:
Solo pueden vigilar en espacios públicos, no pueden grabarte en casa ni entrar en tu propiedad.
No pueden invadir tu intimidad, acceder a tus redes privadas, ni espiarte con métodos ilegales.
Las pruebas solo son válidas si se obtienen legalmente. De lo contrario, se pueden considerar nulas ante un juez.
Esto significa que el hecho de estar de baja no te deja completamente fuera del radar de la empresa, especialmente si hay sospechas fundadas. En estos casos, contar con el asesoramiento de un abogado laboralista puede ayudarte a conocer tus derechos y defender tu situación si se diera algún conflicto legal.
Las empresas pueden contratar a un detective privado si sospechan que la baja no se está usando correctamente, por ejemplo, si creen que el trabajador está simulando una enfermedad o está realizando actividades incompatibles con la incapacidad que ha declarado.
No se trata de espiar por espiar. Debe haber una sospecha razonable de que el empleado está cometiendo un fraude. La vigilancia no puede ser arbitraria ni invasiva. El uso de detectives no puede ser una práctica habitual o sistemática. Solo se justifica si hay indicios concretos de fraude o abuso de la baja. Además, los detectives deben estar legalmente habilitados y registrados. No vale cualquiera.
Un detective puede observar tus actividades en espacios públicos: si haces deporte cuando supuestamente tienes una lesión, si trabajas en otro sitio mientras estás de baja o si llevas una vida incompatible con la enfermedad que has declarado.
Lo que no puede hacer es invadir tu intimidad. Nada de entrar en tu casa, grabarte dentro de tu domicilio, acceder a tus redes sociales privadas o interceptar comunicaciones. Todo eso sería ilegal y cualquier prueba obtenida de esa forma no sería válida en un juicio.
En caso de que la empresa actúe de forma abusiva o te sientas acosado, puedes denunciar la situación. Este profesional te informará sobre los límites legales de la vigilancia y te ayudará a presentar una reclamación si se han vulnerado tus derechos como trabajador.
Si el detective recoge pruebas de que estás abusando de la baja médica, la empresa puede iniciar un despido disciplinario. Esto significa que no recibirías indemnización y, en algunos casos, podrías incluso enfrentarte a consecuencias penales si hay fraude a la Seguridad Social.
Las pruebas del detective sí pueden usarse en un juicio laboral, siempre que se hayan obtenido de forma legal y respetando tus derechos fundamentales. Y, ojo, porque hay muchas sentencias en las que este tipo de pruebas han sido clave para declarar procedente el despido.
Hay casos en los que el seguimiento se ha hecho y no se ha encontrado ninguna irregularidad, o incluso ha reforzado que la baja estaba bien justificada. Así que no te preocupes si estás haciendo las cosas bien.
En cualquier caso, si te encuentras ante una situación de este tipo, lo más recomendable es contar con el apoyo de un abogado. Este profesional podrá revisar las pruebas presentadas, valorar si se han vulnerado tus derechos y defenderte ante un posible despido improcedente. Recuerda que no todo lo que capte un detective es necesariamente válido y que la empresa también tiene límites.