Tener un nuevo hijo es una alegría, pero también puede generar preocupación cuando ya estás pagando una pensión de alimentos a los hijos de una relación anterior. Es habitual que muchos padres y madres se pregunten si pueden reducir la pensión de alimentos al tener nuevas responsabilidades familiares.
Si necesitas asesoramiento, en nuestra plataforma web Easyabogado encontrarás abogados especializados en derecho de familia que pueden estudiar tu caso, valorar si existe base legal para solicitar una modificación y acompañarte en todo el proceso judicial.
Si se puede reducir la pensión de alimentos, pero no siempre. La ley permite solicitar una reducción de la pensión cuando se produce un cambio sustancial en la situación económica o familiar del obligado a pagarla.
La Ley de Enjuiciamiento Civil establece que las medidas acordadas en un proceso de divorcio o separación pueden modificarse cuando varíen de forma importante las circunstancias tenidas en cuenta al fijarlas.
El nacimiento de un nuevo hijo puede ser una de esas circunstancias ya que supone un aumento de las cargas familiares y una redistribución de los recursos económicos del progenitor. Sin embargo, no basta con alegar que hay un nuevo hijo: hay que demostrar que la situación económica ha cambiado de manera relevante y que el pago de la pensión actual resulta insostenible.
Los tribunales valoran cada caso de forma individual analizando distintos factores. En general, los jueces tienen en cuenta tres aspectos fundamentales:
El cambio real en la economía del solicitante. Debe probarse que el nacimiento del nuevo hijo ha supuesto un impacto económico significativo, ya sea por una reducción de ingresos o por el incremento de los gastos necesarios para el nuevo menor.
La estabilidad de la nueva situación. No se aceptan reducciones temporales o coyunturales. La nueva circunstancia (el nacimiento del hijo y los gastos derivados) debe tener un carácter estable y duradero.
El interés superior de los hijos. El juez debe garantizar que todos los hijos estén debidamente atendidos. Por tanto, no puede acordar una reducción que ponga en riesgo el bienestar de los hijos beneficiarios de la pensión.
El nacimiento de otro hijo puede ser motivo para solicitar una revisión, pero el juez valorará si la economía del solicitante realmente ha cambiado y si la reducción no perjudica gravemente a los hijos anteriores.
El procedimiento se realiza a través de una demanda de modificación de medidas. Este trámite debe presentarse ante el mismo juzgado que dictó la sentencia de divorcio o separación en la que se fijó la pensión. El proceso es el siguiente:
Primero, el abogado debe redactar la demanda, explicando las nuevas circunstancias (el nacimiento del hijo, los cambios económicos, la carga familiar adicional…) y aportar toda la documentación que lo respalde.
Después, se da traslado a la otra parte para que pueda oponerse o aportar sus argumentos. Finalmente, el juez celebra una vista judicial,en la que valora las pruebas de ambas partes y decide si procede modificar la cuantía.
Es importante entender que la reducción no es automática, hasta que el juez no dicte una nueva resolución, sigues obligado a pagar la pensión original. Si dejas de hacerlo, podrían reclamarlo judicialmente e incluso generarse una deuda.
Por eso, antes de tomar decisiones por tu cuenta, conviene contratar un abogado especializado en divorcios que te asesore y gestione el procedimiento de forma segura y conforme a la ley.
Para acreditar el cambio de circunstancias y justificar la reducción de la pensión deberás aportar pruebas que respalden tu situación económica actual, como:
El certificado de nacimiento del nuevo hijo.
Tus nóminas recientes o declaración de ingresos.
Facturas, justificantes de gastos familiares o escolares.
Recibos de hipoteca o alquiler, y otros gastos fijos.
Toda esta documentación ayudará al juez a tener una imagen clara de tu capacidad económica y de las nuevas responsabilidades familiares que has asumido.
El nacimiento de un nuevo hijo puede justificar la reducción de la pensión de alimentos, pero no de forma automática. Es necesario acreditar un cambio económico real y estable que haga inviable mantener el importe anterior, siempre respetando el interés superior de los hijos ya existentes.
Por eso, antes de iniciar cualquier trámite, lo más recomendable es consultar con un abogado especializado en derecho de familia. Este profesional analizará tu caso, te ayudará a preparar la documentación y presentará la demanda ante el juzgado correspondiente.