Hoy en día, una foto puede dar la vuelta al mundo en segundos. Basta con que alguien la suba a redes, la comparta en un grupo o la use en una web sin tu permiso. ¿Y si esa foto es tuya? Si publican una foto tuya la ley te respalda ya que tienes derecho a decidir sobre tus imágenes. En este artículo te contamos qué puedes hacer si han publicado una foto tuya sin tu consentimiento.
Si necesitas recurrir a la vía legal en la plataforma de Easyabogado encontrarás abogados especializados que pueden ayudarte con tu caso, te informarán y asesorarán sobre los pasos que debes seguir.
Si alguien publica una imagen en Internet sin tu consentimiento el primer paso es guardar pruebas, hacer capturas de pantallas de la imagen con las fechas y los datos de la persona que lo ha publicado. Es importante tener pruebas si decides reclamar o denunciar. También es recomendable pedir directamente que retiren la imagen, dejando claro que no has dado permiso y solicitas la eliminación inmediata.
Si la imagen está en redes sociales como Instagram, Facebook o TikTok, puedes reportarla directamente a través de sus sistemas de denuncia por vulneración de derechos de imagen o privacidad.
Si no consigues que la imagen se retire, entonces sería el momento de presentar una reclamación ante la AEPD. Aunque no todas las publicaciones de fotos entran bajo su ámbito, sí puede intervenir si hay datos personales involucrados (por ejemplo, si apareces identificado o junto a tu nombre).
Si la publicación de la imagen te ha causado un daño (laboral, personal, reputacional...), puedes exigir responsabilidades legales. Un abogado especializado puede ayudarte a valorar si procede una reclamación civil por daños o incluso una denuncia penal, si hay acoso, amenazas o difusión con mala intención.
Cuando descubres que alguien ha subido una imagen tuya sin permiso, es normal sentir rabia, vergüenza o incluso indefensión. Pero no estás solo: la ley te da herramientas para actuar.
El primer paso, una vez hayas recopilado pruebas, es decidir a través de qué vía vas a denunciar. Si la imagen ha sido publicada en redes sociales, puedes usar los canales internos de denuncia de la plataforma: suelen tener formularios específicos para denunciar vulneraciones de derechos de imagen o privacidad. Este proceso es gratuito y suele ser bastante ágil.
Si eso no funciona o la publicación tiene un carácter más grave (por ejemplo, se difunde con intención de humillar, acosar o dañar tu reputación), entonces conviene dar un paso más: presentar una reclamación ante la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD). Desde su página web puedes presentar tu caso, adjuntar las pruebas y explicar lo ocurrido. La AEPD tiene capacidad para investigar, mediar y sancionar.
En los casos más delicados; como si se están usando tus fotos para suplantar tu identidad, acosarte o chantajearte; puedes acudir directamente a la Policía o la Guardia Civil y presentar una denuncia penal. Ellos derivarán el caso al juzgado si lo consideran oportuno. En estas situaciones lo más recomendable es contratar un abogado penalista que te asesore de manera adecuada.
Y si el daño que te han causado ha sido importante, porque la publicación ha tenido mucho alcance o ha afectado a tu vida personal o laboral, puedes demandar por la vía civil para reclamar una indemnización por daño moral. En este caso, contar con asesoramiento legal es muy recomendable.
En España, el uso de tu imagen sin permiso puede vulnerar derechos fundamentales, concretamente:
El derecho a la propia imagen, recogido en la Constitución Española.
La Ley Orgánica, que protege el honor, la intimidad personal y la propia imagen.
Esto significa que nadie puede publicar, difundir o usar tu imagen sin tu consentimiento, salvo en casos muy concretos. Y si lo hacen, puedes exigir responsabilidades.
Hay algunas excepciones en las que se puede usar la imagen de una persona sin consentimiento:
Si aparece en un evento público o de interés informativo, como una manifestación o un acto oficial.
Si la persona aparece de forma accesoria en una fotografía de un lugar público.
Si la imagen ha sido cedida previamente con consentimiento para ciertos fines.
Estas excepciones son muy concretas y deben analizarse caso por caso. Si no se cumplen, la publicación sin consentimiento es ilegal.
La ley protege aún más a los menores. Ni siquiera los padres pueden publicar libremente imágenes de sus hijos si existe conflicto entre ellos (por ejemplo, en caso de divorcio). En cualquier caso, publicar la imagen de un menor sin el consentimiento de los representantes legales está prohibido y puede tener consecuencias legales graves.
Si alguien publica una foto tuya sin tu permiso, tienes todo el derecho a pedir que la retiren y si no lo hacen, puedes reclamar legalmente. Tu imagen te pertenece, y ni redes sociales, ni empresas, ni particulares pueden hacer con ella lo que quieran.
Publicar imágenes sin permiso no es solo una falta de respeto, es una vulneración legal que puedes denunciar por varias vías. Y cuantas más pruebas reúnas, más opciones tendrás de hacer valer tus derechos.